lunes, 15 de julio de 2013

Tolerancia Humana a La Aceleración



“Tolerancia Humana a la aceleración y Sacudimiento”

Objetivos:

General:
·         Analizar la aceleración máxima que puede tolerar el cuerpo humano.
Específicos:
·         Comprender los factores externos que influyen en la percepción de la aceleración por los sentidos corporales.
·         Entender en qué consiste el sacudimiento y su método de cálculo.

Introducción:

     Es interesante señalar que el cuerpo humano no siente la velocidad excepto con los ojos, pero es muy sensible a la aceleración. Al viajar en un automóvil, a la luz del día, uno puede ver el paisaje que pasa y tener una sensación del movimiento. Pero, si se viaja de noche en un avión comercial a una velocidad constante de 500 mph, no se tiene ninguna sensación del movimiento mientras el vuelo sea tranquilo. Lo que se puede sentir en esta situación es cualquier cambio de velocidad debido a la turbulencia atmosférica, los despegues o aterrizajes. Los canales semicirculares en el oído interno son acelerómetros sensibles que reportan cualquiera aceleración. Sin duda también la sensación de aceleración cuando se viaja en un elevador y arranca, se detiene o se vira en un automóvil. Las aceleraciones producen fuerzas dinámicas en los sistemas físicos, como se expresa en la segunda ley de Newton, F = m.a, la fuerza es proporcional a la aceleración, con la masa constante. Las fuerzas dinámicas producidas en el cuerpo humano en respuesta a la aceleración pueden ser dañinas si son excesivas. El cuerpo humano, después de todo, no es rígido. Es una bolsa flojamente empacada de agua y tejidos, la mayoría de los cuales son internamente móviles. Las aceleraciones en la dirección de la cabeza o los pies tenderán a privar o a inundar el cerebro con sangre, ya que este líquido responde a la ley de Newton y se mueve con eficacia dentro del cuerpo
 en dirección opuesta a la aceleración impuesta, ya que retrasa su movimiento con respecto al esqueleto. La escasez de sangre en el cerebro provoca inconsciencia; el exceso transforma la visión. Una u otra situación provoca la muerte si persisten durante un periodo largo.


























TOLERANCIA HUMANA A LA ACELERACIÓN

Las tolerancias humanas dependen de la magnitud de la aceleración, de la longitud del tiempo que se aplica, de la dirección actúa, de la localización del uso, y de la postura del cuerpo. El cuerpo humano es flexible y deformable, particularmente los tejidos finos más suaves. Una palmada dura en la cara puede imponer centenares de g localmente pero no producir cualquier daño verdadero; 16 constantes g por un minuto, sin embargo, puede ser mortal. Cuando vibración es el pico experimentado, relativamente bajo g los niveles pueden ser seriamente perjudiciales si están en frecuencia de la resonancia de órganos y de tejidos finos conectivos.


A un cierto grado, g- la tolerancia puede ser medible, y hay también variación considerable en capacidad natural entre los individuos. Además, algunas enfermedades, particularmente cardiovascular los problemas, reducen g- tolerancia. Aceleración vertical del eje. El avión, particularmente, ejerce la aceleración a lo largo del eje alineado con la espina dorsal. Esto causa la variación significativa en la presión arterial a lo largo de la longitud del cuerpo del tema, que limita las g-fuerzas máximas que pueden ser toleradas. En el avión, las g-fuerzas están a menudo hacia los pies, que fuerza sangre lejos de la cabeza; esto causa problemas con los ojos y el cerebro particularmente. Como las g-fuerzas aumentan brownout/greyout puede ocurrir, donde la visión pierde tonalidad. Si la aceleración se aumenta más lejos visión del túnel aparecerá, y entonces en más alto inmóvil g, pérdida de visión, mientras que se mantiene el sentido. Se llama esto el “ennegrecerse hacia fuera”. Más allá de este punto pérdida de sentido ocurrirá, conocido a veces como “g- localización“(“la localización” está parada para “la pérdida de sentido”). Mientras que la tolerancia varía, una persona típica puede dirigir cerca de 5 g (49m/s) antes g- loc'ing, pero con la combinación de especial g-juegos y esfuerzos de filtrar músculo-ambos de qué acto puede forzar sangre nuevamente dentro de los pilotos cerebro-modernos típicamente la manija 9 g (de 88 m/s²) sostenido (por un período del tiempo) o más. La resistencia a la “negativa” o a los Gs ascendentes, que conducen sangre a la cabeza, es mucho más baja. 
Este límite está típicamente en el −2 a −3 g (de −20 m/s² al de −30 m/s²) gama. La visión del tema da vuelta al rojo, designado a rojo hacia fuera. Esto está probablemente porque los tubos capilares en los ojos se hinchan o estallan bajo presión arterial creciente. Los seres humanos pueden sobrevivir hasta cerca de 20 a 35 g instantáneamente (por un período del tiempo muy corto). Cualquier exposición a alrededor 100 g o más, aunque momentáneo, es probable ser mortal, aunque el expediente es 179 g. También se ha dicho que la altura de una persona puede ser acortada si la alta aceleración se sostiene para una cantidad de tiempo continua. Aceleración horizontal del eje. El cuerpo humano es considerablemente mejor en las g-fuerzas el sobrevivir que son perpendiculares a la espina dorsal. En general cuando la aceleración empuja el cuerpo al revés (familiar conocido como “globos oculares en”) se demuestra una tolerancia mucho más alta que cuando la aceleración está empujando el cuerpo remite (los “globos oculares hacia fuera”) puesto que los vasos sanguíneos en la retina aparecen más sensibles en la última dirección. 

Los experimentos tempranos demostraron que los seres humanos inexperimentados podían tolerar 17 g globo-en (comparado a 12 g globos oculares-hacia fuera) por varios minutos sin la pérdida de sentido o de daño a largo plazo evidente.


Se ha investigado mucho, en gran medida por las fuerzas armadas y la NASA, para determinar los límites de la tolerancia humana a aceleraciones sostenidas en varias direcciones. Niveles promedio de aceleración lineal en diferentes direcciones que pueden tolerarse de manera voluntaria durante periodos específicos. Cada curva muestra la carga G promedio que puede ser tolerada durante el tiempo indicado. Los puntos de datos obtenidos en realidad estaban en los ejes; las líneas como tales se extrapolaron con los puntos de datos para formar figuras concéntricas. Las unidades de aceleración lineal se definieron como pulg/seg2, pies/ seg2 o m/ seg2. Otra unidad común de aceleración es la g, definida como la aceleración producida por la gravedad, la que al nivel del mar es aproximadamente de 386 pulg/ seg2, 32.2 pies/ seg2 o 9.8 m/ seg2. La g es una unidad muy conveniente para medir las aceleraciones que afectan a los humanos, ya que vivimos en un ambiente de 1 g. Nuestro peso, sentido por nuestros pies o nalgas, está definido por nuestra masa al tiempo que la aceleración lo hace por gravedad o mg. Por lo tanto, una aceleración impuesta de 1 g sobre la línea de base de la gravedad humana, o 2g, será sentida como una duplicación del peso. A 6g se puede sentir 6 veces más el peso que lo normal y se tendría gran dificultad incluso para mover los brazos en contra de esa aceleración. La figura anterior muestra que la tolerancia del cuerpo a la aceleración es una función de su dirección con respecto al cuerpo, su magnitud y su duración. Observe también que los datos utilizados en esta tabla se desarrollan con pruebas realizadas en personal militar, joven, saludables y en una excelente condición física. No se espera que la población en general, los niños y los ancianos en particular sean capaces de soportar semejantes niveles de aceleración. Puesto que muchas máquinas se diseñan para uso humano, los datos de tolerancia a la aceleración deben ser de gran interés y valor para el diseñador de maquinaria.

Otro punto de referencia útil cuando se diseña maquinaria para uso humano es intentar relacionar las magnitudes de las aceleraciones que comúnmente se experimentan con los valores calculados de su diseño potencial. 

CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES:

La tolerancia humana depende de la magnitud de la fuerza G, la duración, la dirección, el lugar aplicado y la postura del cuerpo.
El cuerpo humano es flexible y deformable (ley de la materia), particularmente los tejidos livianos. Un gran golpe en la cara podría llegar a los cientos de Gs, pero no produciría ningún daño real; 16G por un minuto puede ser, sin duda, mortal. Cuando hay vibración de por medio, fuerzas Gs relativamente bajas pueden dañar seriamente si se encuentran en la frecuencia de resonancia de los órganos y tejidos. Hasta cierto grado, la tolerancia a las fuerzas G puede ser entrenable, habiendo una considerable variación entre la resistencia de distintos individuos. Algunas enfermedades, como problemas cardiovasculares, reducen la tolerancia a las fuerzas G.

El sacudimiento se considera como la tasa de cambio de la aceleración respecto a un determinado tiempo. Es de mucha importancia el control y reducción al mínimo del sacudimiento en el diseño de máquinas, en especial si se desean bajas vibraciones. Las grandes magnitudes de sacudimiento tienden a excitar las frecuencias naturales le vibración de la máquina o estructura en la cual está montada e incrementan la vibración y los niveles de ruido. El control del sacudimiento es de más interés en el diseño de levas que de mecanismos.






Por:
Carlos Ernesto Mora Bayas
David Decker Triguero





























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